Querido Arretxea:
Cuántos recuerdos me traes a la cabeza. Vacaciones, sol,
playa, comida especial con amigos, relax y disfrute. Ya nos presentaron unos
días antes, pero no tuve la oportunidad de conocerte hasta que te descorché aquel día.
Les gustaste mucho a
los que te probaron, pusieron cara de sorpresa cuando te conocieron. Les dije
que eras de una Bodega francesa que tiene
tu mismo nombre y que la llevan el matrimonio formado por Thérèse et Michel Riouspeyrous.
Al principio no te
entendimos, te sentimos complejo, intenso, meloso y sutilmente floral, pero poco a poco fuiste
despertando otros aromas de los que disfrutamos cada vez mas agradecidos de que
estuvieses con nosotros aquella tarde.
Nos interesamos por ti y supimos que estabas hecho de 3
variedades de uva poco conocidas para nosotros: Gros Manseng (60%), Courbu (5%)
y Petit Manseng (35%). Que sabiendo lo
bien que te sientan los tendremos en cuenta para próximas ocasiones en las que
nos vayamos a juntar.
- Vistes un color amarillo brillante por el que no llamas demasiado la atención, pero una vez que te acercas a la nariz empiezas a desprender aromas intensos, complejos y sutilmente florales con matices de fruta de hueso.
- Poco después si te volvimos a oler y nos dimos cuenta de que habías evolucionado, de que nos despertabas aromas a hierba, manzana dulce y balsámicos.
- Cuando nos atrevimos a llevarte a la boca nos resultas fresco, sabroso, con una fruta suave a mandarina o pomelo y elegante a la vez. Supiste mantener un equilibrio casi perfecto en nuestra paladar.
Nos llenaste la boca de un placer exquisito y por eso te
quisimos presentar a tus compañeros de maridaje: a cigala real y a rodaballo
con el que te dimos cuenta aquel estupendo día que tardaremos en olvidar.
Un fuerte abrazo amigo Arretxea, esperamos poder disfrutar
de ti otra vez, hasta entonces...
Amaia Velasco
No hay comentarios:
Publicar un comentario