Por fin después de mas de un mes de espera lo tengo... el post por el que tantos y tantas veces me habéis preguntado en el último mes. Es lo que tiene el verano, que apetece mas ir a la playa a tostarse al rico sol que quedarse en casa seleccionando fotos y escribiendo. Espero me perdonéis.
No creo que haga falta que os comente demasiado sobre el templo de la gastronomía sobre el que os escribo hoy.
A estas alturas ya sabéis de sobra que es el Super Number One de los restaurantes en la lista de los 50 Best.
Los hermanos Roca han conseguido ser el TRI perfecto para dar lo mejor de sí cada uno en su especialidad. Joan en la cocina, Jordi en Pastelería y Josep como sommelier y hacer del Celler lo que es, una gran familia.
Seguro que más de uno estará pensando que intentaría hacer de las mías para conseguir reserva en poco tiempo y que no sería capaz de esperar todo el tiempo que se requiere (lo cual es prácticamente impossible).
Pues si señores, aunque no se lo crean... Yo, Amaia Velasco con DNI blablabla y en pleno uso de mis facultades, declaro haber realizado una petición de reserva vía mail a fecha 1 de Agosto de 2014 al Celler de Can Roca sabiendo que cenaría 11 meses después como el común de los mortales, sin intermediarios ni na'. Osease, todo legal.
Y por fin llegó la fecha, el 28 de Julio de 2015 pasará a la historia como el día en el que cene en el mejor restaurante del mundo. Se me ponen los puntas sólo de pensarlo, ¡qué bien suena! El mejor del mundo...
Y ahí estaba yo, puntual como siempre a las 21:00h tal y como me habían estado pidiendo todas las RE-RE-RE-REconfirmaciones a la reserva que me fueron mandando.
Unos minutos antes para las fotos de rigor en la entrada y todos los comensales llegando casi a la misma hora para esa concentración de almas curiosas, hambrientas y privilegiadas que se disponían a disfrutar de una de las mejores noches de sus vidas.
Divertido el rato antes de entrar al restaurante en el chill-out / terraza / fumadero. En un momento y casi sin darme cuenta me encontré hablando con unos ingleses, unos chicos franceses y otros una familia de mexicanos entre el "yo te saco foto" y "tu me sacas foto".
Una vez sentados en la mesa Nº2 elegimos el "Menú Festival" con maridaje, el más largo de los dos que disponen. En la foto la mesa Nº3 (no la nuestra) una familia de argentinos nos fue amenizando la velada con sus divertidos comentarios.
Muy irónica la decoración de las mesas con 3 ROCAS...
Una pequeña inspección al nuestro alrededor y otra un poco mas profunda y exhaustiva a los tres tomos enciclopédicos de carta de vinos.
Ya nerviosita perdida esperando dar comienzo los aperitivos con una copa de cava.
Damas y caballeros, con todos ustedes... que de comienzo el show de El Celler de Can Roca.
En los aperitivos nos ofrecieron su ya famoso "Comerse el mundo". Cinco países interpretados en pequeños y delicados bocados.
México: burrito de mole poblano y guacamole
Turquía: Tartaleta de hoja de parra con puré de lentejas, berenjena y especias con shots de yogur de cabra y pepino.
China: verduras encurtidas con crema de ciruelas.
Marruecos: almendra, rosa, miel, azafrán, ras el hanout, yogur de cabra.
Corea: pan frito con panco y panceta con salsa de soja, kimchi y aceite de sésamo
"Memoria de un bar en las afueras de Girona": calamares a la romana, riñones al jerez, tortilla de patata y cebolla, espina de anchoa en tempura de arroz de Pals, Campari.
Aceitunas de helado de oliva verde
Crujiente de maíz con corteza de cochinillo ibérico
Coral: escabeche de percebes al laurel y albariño. Ceviche de dorada.
Bombón de perrechicos
Brioche de trufa
Una gran variedad de panes y cada uno mejor que el anterior, doy fe.
Consomé de verano: emulsión vegetal de zanahoria, habitas, tirabeques, judía perona, flores y hojas
Helado de ajoblanco con merengue de Jerez, clorofila y sardina
Caballa con encurtidos y hueva de mújol, salsa de caballa con vino blanco, limón, alcaparras y guindillas en vinagre, tomate frito, hueva de mújol, caballa marinada con sal y azúcar
Infusión de sauco con cerezas al amaretto, cerezas al genjibre y anguila ahumada
Gamba marinada en vinagre de arroz, jugo de la cabeza, patas crujientes, velouté de algas y pan fitoplancton
Ostra con anémona, salsa de anémona, arena de ajoblanco, nueces tiernas, algas y manzana
Raya confitada con aceite de mostaza, mantequilla noisette, miel, vinagre de chardonnay, bergamota, mostaza aromatizada, alcaparras confitadas y avellana ahumada
Besugo con samfaina
Cochinillo ibérico con ajos tiernos a la brasa, ajo verde, ajo negro, ñoras al ajo
Cordero con puré de berenjenas y garbanzos, pies de cordero y tomate especiado
Jarrete de ternera con tuber aestivum, tuétano, tendones y aguacate terroso
Suspiro limeño: leche, lima, cilantro, dulce de leche y pisco
Cromastismo naranja
Anarkia de chocolate
¡Y que no falten las txutxes! Una buen abanico de petit fours elegidos y colocados divinamente por mí.
No me olvido de enseñaros mi comanda y la chuleta de vinazos con los que disfruté durante toda la cena.
Un maridaje digno de 3 estrellas.
¿Y que hay después del postre?
Pues una visita a la cocina y a la bodega para cotillear como a mí me gusta.
Nunca está de más conocer el despacho con vistas a la cocina de Joan Roca.
O la pizarra llena de anotaciones.
¿Por qué no la partida de pastelería?
y el cuarto de producción.
¡Sorpresa con Jordi paseándose por la cocina! seguro que pensaba que ya se acababa el día cuando le asaltó Amaia por detrás ;)
Muy amable y cercano nos dedico unos minutos y un pedazo de posado cual famoso Hollywoodiense en un photocall de alfombra roja.
Y para terminar la no menos importante bodega.
Miles de referencias cuidadosamente seleccionadas para nuestro disfrute personal.
Sólo me queda dar las gracias a todo el personal del Celler por lo bien que nos trataron, por su paciencia y por consentirme tanto.
Ahora entiendo y sé lo que sois, un gran equipo de profesionales con muchas horas de trabajo a vuestras espaldas dispuestos a darlo todo por defender y disfrutar del oficio.
Moltes gràcies!!!