lunes, 17 de febrero de 2014

Marqués de Riscal 2008 (D.O Rioja)







Rioja de todo la vida, basta olerlo y dos segundos en boca para darnos cuenta de que estamos ante un vino clásico de los que gustan a un porrón de gente.



No me declaro fan del “Marqués”,  pero ya sólo por todo lo que venden y lo conocido que es creo que se merece unas líneas en éste blog, mi tiempo y admiración aunque no comparta del todo el gusto por el Rioja tradicional. Hasta he llegado a leer que es uno de los grandes vinos españoles. ¿Para tanto es? Personalmente pienso que no, pero mi gusto de poco cuenta. Creo que le han sabido dar muchísima publicidad, que llevan una buena estrategia de marketing y tienen la bodega-hotel en Elciego (Álava) con un rollo Guggenheim ultramoderno que les sitúa en el “Top guay” que nada tiene ver con lo tradicional que es la imagen que le dan al vino, lo digo sobre todo por el diseño sus etiquetas.






Nosotros lo beberemos en grandes cantidades, pero lo de nuestros vecinos no tiene nombre. Puede que sea un poco-bastante mala con lo que voy a decir, pero tengo comprobado y requetecomprobado que si eres francés hay un 99,99 % de posibilidades de que te vayas a beber un Marqués de Riscal aunque te pongan por delante una carta con mas de 200 vinos para elegir. 




Bueno, creo que ya vale de sinceridad por hoy. Puede que después de que se lea éste post reciba malas críticas, pero es lo que tiene la libertad de expresión, para gustos los colores…




Él vino se compone de la uva tempranillo en un 90% aproximadamente, el otro 10% lo componen graciano y mazuelo de viñas viejas. Ha pasado por una crianza de 24 meses en barricas de roble americano y 12 meses en botella. Por el módico precio de unos 14 euros lo podréis encontrar hasta en los supermercados.



  • A la vista nos encontramos ante un vino color rubí con tonalidades granates-anaranjados propios de su edad, limpio y brillante.
  • En nariz bastante intenso y complejo donde destacan los aromas a fruta negra madura, las notas balsámicas y especiadas. La madera y la vainilla también están presentes.
  • En boca muy redondo y destacando las frutas que se encontraban en nariz. Muy equilibrada la tanicidad y la acidez.



lunes, 10 de febrero de 2014

Txubillo





El Txubillo es nuestro nuevo descubrimiento en la ciudad. Se trata de un restaurante situado cerca de la playa de la Ondarreta que fusiona la comida japonesa con la vasca. 




Os preguntareis ¿cómo puede ser? Pues no se complican demasiado, tienen una carta corta, pero bastante completa con productos frescos y un buen saber hacer.

Y en la barra podéis disfrutar de algunas elaboraciones de la carta pero en tamaño mini.




Txubillo es regentado por un matrimonio nipón, Akari Yoshida y Hitoshi Karube que vinieron a Donosti a aprender los secretos de la cocina vasca y aquí se quedaron.




Un restaurante que llevaba tiempo en mi lista de "pendientes" y que por fin tuve tiempo y la agradable compañía de mis compañeros de trabajo para disfrutar de una comida japonesa diferente a lo habitual, muy bien preparada y de raciones abundantes.

Tal y como ellos lo describieron, su cocina es japonesa pero de cantidad vasca, juzgar vosotros mismos...


Tempura de verduras variadas con salsa romesco



Tataki de solomillo



Foie-Gras con salsa Teriyaki



Anguila asada



Sake caliente



Brownie de chocolate con helado de maracuyá
Panacota de Té Verde
Sabayón de manzana